El Sol abre nuevamente su canal de
instrucción a través del escribiente, en esta oportunidad para volcar un
concepto que es necesario sea meditado en el corazón de cada estudiante: “LA
PAZ”.
El “grado de Paz” que se pueda
reflejar en el aura de un ser humano está relacionado a su nivel de maduración
álmica (http://el-alma-humana-y-divina.blogspot.com.ar). La Paz
verdadera no implica simplemente ‘no-violencia’ exteriorizada, como muchos
interpretan, sino “COMPRENSIÓN”.
La Paz y la Comprensión son “las dos caras de una misma
moneda” en el Ser. No hay verdadera Paz sin profunda comprensión de la vida y el ser.
Por lo
tanto, el sendero hacia la Paz es un camino escalonado donde cada escalón es un
determinado nivel de comprensión, o bien, un ‘nivel de conciencia’, como
también puede llamársele a la Comprensión. Es por este motivo que el encuentro
con la Paz no implica simplemente establecer códigos civiles de ética y
moralidad para que sean obligadamente obedecidos por todos, porque así no
funcionará jamás una verdadera era de civilización de Paz.
El único
camino posible hacia una civilización de Paz es el sacrificio de los egos
inferiores en aras del ‘Bien común’, pero esto solo lo pueden empezar a
realizar efectivamente las almas ya maduras, es decir, las que ya han
reencarnado muchas veces, experimentando la vida de variadas maneras; almas que
han llegado a madurar adquiriendo una ‘maceración’ de las experiencias en forma
de vital ‘COMPRENSIÓN’. Las almas que ya han macerado tal fruto pueden saber a
consciencia lo que Es la Paz (en el grado vivenciado) porque, como hemos dicho,
“la comprensión trae la Paz a cuestas”… Sin comprensión, todo intento por
lograr la Paz por medios y acciones externos, aún con la ‘buena voluntad’, será
trunco, porque la
Paz vive asentada en la Comprensión; la Comprensión es su cimiento.
Este concepto es básico, y es por
ello que es abordado en primer término en esta serie de mensajes. La Paz es la
primera ‘perla’ que enhebrará el ‘collar instructivo’ que hoy se abre en este
nuevo espacio.
Dispónganse a seguir las
promulgaciones de ‘las perlas’ que serán ofrecidas, porque todas engarzan en
una “comprensión”, la cual, al ser abordada por vuestras consciencias, hará
posible un nuevo y renovado afloramiento de la Paz en vuestros templos-almas.
PAX
CRISTI
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